Un equipo formado por científicos del Instituto Smithsonian para la Conservación y de otras organizaciones descubrió una anguila tan primitiva que se tuvo que crear una nueva familia, un nuevo género y una nueva especie para describir su relación con las demás.
Para poder confirmar o desmentir si se trataba de una nueva especie, los investigadores decidieron bucear en la cueva submarina de República Palau, en busca de un ejemplar. A 35 metros de profundidad, dieron con una hembra de 18 centímetros de longitud. Los expertos destacaron que las características de la anguila podrían ser el resultado de una evolución independiente que se remota a mas de 200 millones de años atrás.