Dar un beso puede llegar a ser todo un arte, aunque también se puede considerar que tiene su propia ciencia.
Esta ciencia es llamada Filematología, esta ciencia y su investigación, han revelado que el intercambio de saliva nos ayuda a escoger la pareja más adecuada.
En una reunión de la Asociación Americana para el Avance de la Ciencia (AAAS), la neurocientífica Wendy Hill explicó este proceso, en el que las sustancias químicas contenidas en la saliva brindan información para evaluar si la pareja es la más adecuada.
No sólo ayuda a evaluar la pareja, también tiene otra ventaja, que es la de reducir los niveles de estrés, esto es posible ayudando a bajar niveles de CORTISOL, así como elevar los niveles de OXITOXINA, esto siempre y cuando sea con la persona adecuada.
La saliva masculina tiene TESTOSTERONA, sus besos les ayudan a medir los niveles de ESTRÓGENOS femeninos de la pareja, para así medir su grado de fertilidad.
En el caso de las mujeres, el beso les ayuda a detectar el estado del SISTEMA INMUNE de su pareja, y así saber “cuánto se cuida”.