
En un nuevo y atinado intento por reciclar desechos altamente nocivos para el planeta, las viviendas hechas a base de basura se han convertido en toda una alternativa para cuidar del planeta y mejorar la calidad de vida de comunidades marginadas.
Se calcula que en México se producen anualmente 25 millones de llantas de desecho, de las cuales unos ocho millones se concentran en el Distrito Federal y Estado de México, por lo que será fácil obtenerlas, además de que las viviendas ecológicas tendrán vida útil de 40 años, que puede prolongarse indefinidamente si reciben mantenimiento adecuado.
Cabe destacar que las características del caucho son apropiadas para las viviendas debido a la tenacidad, la resistencia, la flexibilidad y la baja permeabilidad a los fluidos que lo atacan químicamente. Por lo que conviene que este material se encuentre resguardado en las paredes de una vivienda y no en lugares de riesgo.